top of page
Buscar

La Rienda: danza de confianza y entendimiento profundo

Hay días en los que el aire parece tener una tensión dulce, como si todo en el ambiente supiera que algo importante está por suceder. Así son los días de torneo de rienda en La Joaquina: jornadas donde la precisión, la conexión y la pasión ecuestre se encuentran para dar lugar a una experiencia que va mucho más allá de la destreza en la pista.


ree

En estos torneos, el protagonista es ese diálogo silencioso entre caballo y jinete. Un diálogo que se expresa en giros perfectos, frenadas limpias y cambios de ritmo que parecen coreografiados. La rienda no es un espectáculo de fuerza, es una muestra de confianza mutua. De entendimiento profundo.


Pero si hay algo que realmente distingue estas competencias es el espíritu que las rodea: una gran familia que acompaña, alienta, sufre y celebra junta. Porque mientras en la pista se juega la técnica, afuera se vive la emoción.


Los padres preparan los caballos con la misma devoción con la que armarían una mochila escolar. Los chicos miran embobados a sus hermanos mayores, queriendo ser ellos algún día. Las abuelas llevan la reposera, los sanguchitos, y un corazón que late fuerte con cada movimiento. Los amigos de siempre están ahí, filmando, aplaudiendo, haciendo chistes para descomprimir los nervios.


ree

Hay algo profundamente humano en estos encuentros. Porque sí, hay medallas, hay podios, hay resultados. Pero el verdadero premio es ese aplauso de la familia cuando todo sale bien. O ese abrazo cuando algo no sale como se esperaba. Es compartir el orgullo, el esfuerzo, la entrega.


En La Joaquina, los torneos de rienda son también un homenaje a ese espíritu. A la tradición que se transmite, al amor por el caballo que se enseña desde chicos, a los valores que se viven más que se dicen: respeto, perseverancia, paciencia.


Gracias a cada familia que nos acompaña, a cada jinete que nos enseña con su entrega, y a cada caballo que nos recuerda que la verdadera destreza nace del vínculo.


Nos emociona ser el escenario de estas historias. Y más aún, poder compartirlas.

 
 
 

Comentarios


bottom of page